«Sueño que mi amor viene cabalgando, y el Puente de Valsyria se alza sobre los acantilados. Él no ha envejecido como yo, en Paradiso el tiempo se detiene. Y yo, una anciana que apenas se sostiene. Entonces mi joven y lozano combatiente me alza en volandas y me mima, abrazándome con ternura... y ahora sí que cruzamos el puente, siendo arropada y sostenida por él. Luego llega la luz, esa inmensa luz que se funde en la Crisálida, pasando a ser ambos, una sola unidad para siempre».
Hola amigos, hoy de nuevo os traigo reseña, una reseña muy especial. Se trata de CARTAS A THYRSÁ. LA ISLA, de Ricardo Reina Martel.
En mis manos el primer tomo de tres que compondrán esta historia, una historia donde la magia, los ancestros, la sabiduría, el poder, y sobre todo el amor, tomarán vuestras manos, secuestrarán vuestra imaginación, y despertarán vuestra pasión.
No temáis, no estaréis solos, pues las leyendas, los recuerdos y las sensaciones nos guiarán en un camino que se os hará hermoso. No os voy a mentir. Habrá momentos en los que vuestro corazón se encoja, no todo es bello en el interior de un bosque, ni todos los bosques son verdosos, también los hay sombríos y llenos de secretos...
Conocí a Ricardo gracias a la publicación de Estatuas de sal. El camino literario nos llevó a los dos hasta Exlibric, la editorial que dio formato en papel a todo este inmenso cosmos que Ricardo ha creado. La propia editorial, en su sinopsis, lo define de esta forma.
El mundo de Thyrsá es un universo paralelo, una exploración onírica entre Tolkien y Michael Ende. Sin embargo, sus habitantes se debaten en una lucha que a veces nos resulta demasiado familiar.
Sensibilidad, dolor, entusiasmo y pasión coinciden en un entorno imaginario donde surgen variopintas mitologías. De la trama surge el dulce aroma de lo céltico y las antiguas tradiciones norte europeas, la Grecia ateniense e incluso descaradas reminiscencias hacia Al-Ándalus.
Entre la riqueza de escenarios, este libro introduce al lector en un mundo de fantasía que se aleja de las superfluas obras del género. En cada página subyace una base de filosofía, siendo el amor y su búsqueda la primera causa como dulce pasión que nos hace trascender a cualquier tipo de conflicto.
«Tenía quince años recién cumplidos cuando sucedió, fue en Jissiel la aldea vecina, escapó de la oscuridad y de repente se encontró con ella. Salió de una caverna malsana y oscura y ella estaba allí, en medio de la nada. No pudo, ni se atrevió a decir palabra alguna, pues salvo Latia, apenas había tenido posibilidad de entablar conversación con otra mujer, por lo que su timidez le delató. Alargó su mano y aceptó el regalo que esta le ofrecía. La criatura más hermosa de la tierra se encontraba frente a él; fascinado no podía apartar los ojos de ella, contemplándola enmudecido. Le llegó el amor de repente...».
Cartas a Thyrsá encierra poder y luchas. Con los matices celtas y las leyendas que el propio autor revela y crea, nos muestra un mundo mágico donde el más pequeño de los detalles cobra un significado oculto.
Magos, hechiceros, comandadores, guerreras, madres mariposa, elementales y también demonios con formas aniñadas y vampirias que escapan y recorren Casalún, Paradiso, El Powa... seres mitológicos, tradiciones, demonios y hermosas mujeres guerreras, ninfas, bosques que están vivos y un sinfín de belleza; pero sobre todo ese fondo, ellos dos. Thyrsá e Ixhian, la niña Mó y Ví.
«Me despojo de las zapatillas apartándolas a un lado y sabiendo lo que he de hacer, danzo en medio del prado, representando y postulando la feminidad de la tierra. El rostro oscuro de la diosa se ilumina como un rayo de luna y mi alma vuela; entonces ya no soy quién creo ser. Me muevo dentro de un círculo que representa todo el firmamento, mientras las niñas sentadas sobre el suelo, bañan con pétalos de flores la tierra. Pierdo el sentido de quién soy y de dónde me hallo; doy vueltas, hasta caer exhausta y justo cuando mis rodillas se clavan sobre la arena agotada, comienzo a sentir el murmullo de una respiración agitada...».
«El príncipe, hijo de Latia, la última Inda Onmarisán, se mantiene a la espera, resguardado tras el garante, que expectantemente me observa...»
«Entre ambos representamos el espíritu y lo primitivo, le llevo conmigo, lo traslado con mucho cuidado, lo acaricio, moldeo, seduzco... poco a poco creamos el movimiento y la forma exacta de la danza...».
La sensualidad aparece en cada rincón, cada letra, cada suspiro. Danzas y miradas, caricias y promesas. Pero no es un libro romántico en sí, sino un libro de fantasía, donde convergen una rica variedad de elementos, entre los que está el sentido del humor, la aventura, el terror, la mitología, y por supuesto... una hermosa historia de amor.
437 páginas conforman este primer volumen, y solo puedo decir que las leí en un fin de semana. Mi impresión sobre este libro es que dará mucho que hablar. A mí me ha hecho soñar y vivir una realidad paralela, y si bien es cierto que son muchos los personajes y por tanto, muchos los nombres, es cierto que el autor nos los va presentando de forma tal, que de inmediato entran en nuestro subconscientes y quedan fijados.
La magia que impregna esta historia es hermosa, pero también trágica. En algunos fragmentos el miedo eriza tu piel, y en otros, la pena te ahoga, más ¿no es así la vida real? ¿No es así como todo se desarrolla?
He leído versos entre la prosa y prosa en los versos, y susurrado las canciones, bailado los momentos y sentido las emociones. Dicen que para cada uno de nosotros existe un libro, uno que nos hará reflexionar sobre nuestra vida, nuestro mundo, libros que marcarán un antes y un después, y Cartas a Thyrsá lo ha logrado con creces, es más, he intentado convencer a Ricardo para que me desvele más, pues quiero saber, necesito saber... pero me temo que habré de esperar, y que en mis manos no está el poder que habita en Paradiso,ni en mí la magia de la Crepsida para detener o acelerar el tiempo...
Me llamó con fuerza la atención lo exquisito de la combinación entre las mujeres maya, guerreras fieras y entrenadas de por vida, con la delicadeza de las niñas de Casalún, pero sobre todo, me ha seducido de forma poderosa la forma en que está escrito, pues incluso en los momentos de tensión o pánico, subyace una belleza oculta.
Una batalla sin cuartel comenzará con este primer tomo, donde los orígenes quedan fijados. No dejes de vivir esta aventura y conocer los entresijos de Erde y sus seres fantásticos.
«Entonces entendí que había comenzado la guerra, una guerra incisa, una larga batalla... ya que Kudra, la Materia Oscura, había regresado».
Su autor
Ricardo Reina nació en la localidad de Coria del Río, creció entre libros y en un mundo en el que le era difícil prosperar. Comenzó a trabajar a los 16 años progresando en el difícil mundo de la cocina entre caminos de ida y vuelta que le llevaron a distintas ciudades y restaurantes de alto standing, hasta que se asentó en Carmona y cansado de tanto traqueteo decidió cambiar su estilo de vida.
Paralelamente a su vida de cocinero, fundó el centro Budista Tibetano de Sevilla, filosofía a la que se adhirió pasionalmente durante muchos años. Es creador multidisciplinar: escultor, pintor fotógrafo y ahora escritor.
Formado en Arteterapia por «El Caminante» en Málaga y fundador de la Asociación «Una casa en el árbol», ha conseguido varios premios en diferentes disciplinas y ha desarrollado distintas exposiciones con su obra.
Con sinceridad, opino que todo este camino recorrido le ha servido para llevar a cabo esta obra, que consigue al mismo tiempo embelesarte con sus paisajes, que hacerte reflexionar con sus personajes y las distintas leyendas que van conformando.
Os invito además a que conozcáis sus blogs...
https://ricardoreinamartell.blogspot.com/
http://cocinadeandalucia.blogspot.com/
Tal vez ésta sea su primera novela, pero estoy segura de que van a existir muchas más y va a ser un autor que dará mucho que hablar. Así que, si no quieres perderte el principio de esta trilogía, aquí te dejo el enlace a la editorial Exlibric, Amazon y Casa del libro, a fin de que puedas adquirirlo cómodamente. No lo dejes escapar, es una auténtica joya.
Qué recuerdos Ricardo, pues quiero que sepas que ya está preparada la reseña del segundo volumen, "Las granjas Paradiso". Confío y espero que te gusten, pues la obra desde luego merece la mejor de las reseñas. Besos :D
ResponderEliminarFueron de los momentos grandes en la vida de uno, justo cuando vio el libro impreso.
ResponderEliminarBesos, Ricardo.