sábado, 27 de noviembre de 2021

El Bosque Powa

 



«El Boque Powa representa nuestro interior.
Se desarrolla en plena naturaleza 
y en él convergen los distintos elementos que ocuparan nuestra vida».

Existe una energía especial y hoy desconocida para nosotros. Se manifiesta en lugares donde el hombre no llega. En dichas zonas, el latido de la tierra es bien distinto, por lo que, en estos momentos es necesaria cierta disciplina para poder sentirla. Hemos olvidado demasiado.

Al Bosque Powa, le llaman el corazón del reino, no es el primer bosque que se levantara en la Isla, nada de eso. A la primera frondosidad, se le llamó la selva del Urbian, pero, y a diferencia de este, el Powa acrecentó su poder cuando todo se hallaba perdido.

El Bosque conformada un solo cuerpo, un gigantesco macrocosmos constituido por múltiples elementos, respondiendo a una misma voz y a un solo cometido; retraerse y aislarse del mundo exterior. 


Un solo organismo en el que todas sus partes protegen y guardan el acceso al interior del mismo, siendo uno de los lugares más recónditos y apartados de la Isla. Un universo sagrado y paralelo a la selva del Urbian en el norte de la isla y tierra de Melodía.

En el interior del Powa perviven dos comunidades; el pueblo de la Roca para los hombres y Casalún, la aldea de las mujeres. A la Roca la guardan los hombres panteras y a Casalún las mayas, las mujeres guerreras.


«Se introdujeron en el interior del Bosque Powa y cruzaron multitud de retorcidos senderos y dando la sensación de entrar en un laberinto sin final, donde un penetrante olor a hinojo y enebro le invadían los sentidos. Riscos y grandiosas vetas de piedra, emergían súbitamente de la tierra, arropadas por plantas trepadoras que ocultaban peligrosas pozas de agua. Un lugar virtuoso en el que los árboles y sus sombras atesoraban el tesoro de un conocimiento inaccesible para el resto de los habitantes de la isla».

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Cartas a Thyrsá –ExLibric- 2018

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